29/11/2021 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
Crecer en un “entorno familiar protector” es esencial para los niños, niñas y adolescentes, ya que posibilita su bienestar físico y emocional, logrando que sus relaciones sean saludables. Por ello, Yakelin Caycho, especialista de Desarrollo Comunitario de Aldeas Infantiles SOS Perú, detalló cómo lograr una crianza afectiva y respetuosa.
¿Qué aprende de mis actitudes?
Muchas veces los progenitores se limitan a dar órdenes, sin embargo, olvidan que sus acciones también son un ejemplo. La comunicación debe ser con amor y empatía para que la relación con los hijos sea afectiva y también firme. Encontrar el punto medio es la clave, evitando los límites excesivos, pero también la permisividad.
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¿Debo ser una madre o padre que corrige o que conecta?
Recordar que las conductas de los niñas y niños tienen una causa o propósito, por lo que preguntas como “¿Qué necesitas?” serán claves para indagar el porqué de una “pataleta”. Luego se debe validar los sentimientos de los hijos y ayudar a que puedan reconocer los nuestros, para así buscar soluciones en conjunto.
¿Hacer caso por miedo al castigo o por responsabilidad?
Los padres deben enseñar a sus hijos a desarrollar habilidades para la vida. Por ello, replantear las órdenes como acuerdos y normas, nos permitirá dar pautas firmes y afectivas. Ten en cuenta que los menores están más dispuestos a seguir normas que ayuden a construir.
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◼ Dialogar en calma
Usar un “tiempo fuera” luego de un comportamiento difícil, brinda espacio para calmarnos antes de tomar una decisión o un iniciar un diálogo.
