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OPINIÓN | Carlos Jaico: “Nuestra razón de ser: el gran paso para la humanidad”

No te pierdas la columna de Carlos Jaico.
21-07-2022

Corría el año 1996 en la ciudad de Friburgo (Suiza) cuando percibí la figura del astronauta Claude Nicollier, llegando al hotel que administraba en mis épocas universitarias. Eran las 20 h. y él buscaba descansar para salir al día siguiente, rumbo al aeródromo de Payerne. Lo acompañé a cenar y me conversó sobre su experiencia como miembro del primer grupo de astronautas de la Agencia Espacial Europea y su paso por la NASA. Fue de allí que salió al espacio para reparar el telescopio Hubble, y mejorar la precisión de las imágenes del universo.

Mi pregunta fue, ¿qué sintió al ver ese gran vacío alrededor? Su respuesta fue: “viendo la tierra, lo pequeños y frágiles que somos.” Años después, llegaría el telescopio James Webb con una potencia cien veces mayor que Hubble. Según la NASA, este nuevo telescopio obtiene la imagen infrarroja más profunda y nítida del universo. La puesta en órbita del centro de observación James Webb, fue el logro de un equipo integrado por Aracely Quispe, ingeniera de origen peruano.

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De seguro, en unos años más, la precisión de estos telescopios nos permitirá ir más lejos y tener una idea más precisa de cómo era el universo unos 700 millones de años después de su comienzo teórico. Paradójicamente, cuanto más exploramos la inmensidad del espacio, más nos acercamos a lo desconocido de nuestros inicios como humanidad. Pero también rara vez nos preguntamos cómo aparecimos sobre la faz de la tierra, para dominarla al fin (hasta destruirla a veces).

Asimismo, mientras más avanzamos en el descubrimiento de la razón de ser del universo, menos nos preguntamos, ¿cuál es la razón de nuestra vida en la tierra? ¿Cuál es esta razón como humanidad y como seres humanos? Como humanidad nos estaría faltando la razón para evitar destruir nuestro planeta, evitando regresar a lejanas épocas en las que el hombre era un lobo para el hombre.

Como seres humanos, seguimos buscando esta razón que nos debe hacer ver la importancia de proteger el planeta, y hacerlo más habitable para las futuras generaciones. Espacio y humanidad, es esa ecuación que aún nos queda por resolver, haciendo el esfuerzo de comprender nuestro propio propósito en esta vida. Llevando como premisa que mientras más busquemos afuera, a lo mejor, menos estaremos buscamos dentro. Allí, donde encontraremos la respuesta al sufrimiento de la humanidad y, de seguro, su remedio.

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