Ministro de Educación ante recorte de fondos para Beca 18: "Más que cantidad se requiere calidad"
El programa Beca 18, considerado una de las principales herramientas de inclusión educativa en el Perú, atraviesa una crisis marcada por la reducción de su presupuesto. En este contexto, el ministro de Educación, Jorge Figueroa, defendió la continuidad del programa y afirmó que "más que cantidad se requiere calidad", en referencia a las becas que se otorgarán en 2026.
La declaración se produjo tras una reunión con jóvenes becarios y exbecarios de la Red Nacional de Juventudes (Renajuv), donde el titular del sector aseguró que el Minedu mantiene coordinación con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) para evaluar alternativas que permitan fortalecer el programa.
"El Pronabec debe ser fortalecido y mejorado con la participación de sus principales actores, que son los jóvenes", enfatizó.
Crisis presupuestal
El mensaje oficial llega en un momento de tensión: el presupuesto aprobado para Beca 18 en 2026 es de apenas S/ 50 millones, cuando se habían solicitado más de S/ 793 millones. Con ese monto, apenas se podrían financiar unas 2.000 becas, muy lejos de las 20.000 prometidas por el gobierno.
La situación ha generado zozobra entre estudiantes y padres de familia, con convocatorias a marchas y protestas en redes sociales. Exministros y especialistas han señalado que el recorte no responde a un "error material", como se intentó explicar, sino a una falta de prioridad política hacia la educación superior.
Respuesta oficial
El ministro Figueroa subrayó que el enfoque del sector es técnico y responsable, rechazando una posible politización del tema. Además, anunció la instalación de una Mesa Técnica con jóvenes becarios, destinada a recoger inquietudes y propuestas para mejorar la calidad del programa.
El ministro también destacó que el presidente José Jerí Oré sigue de cerca el proceso de otorgamiento de becas y que el objetivo es garantizar la continuidad del servicio educativo.
"Más que cantidad se requiere calidad", insistió, al señalar que se busca optimizar el uso de los recursos públicos y brindar respaldo a quienes egresan de la secundaria en situación de pobreza o vulnerabilidad.
Contraste con la realidad
Aunque el discurso oficial apunta a la calidad y al diálogo, la reducción presupuestal pone en riesgo la cobertura y la confianza ciudadana. En un país que lidera la demanda por becas con más de 100.000 postulantes cada año, la disminución de plazas se interpreta como un retroceso en inclusión educativa.
El caso expone una brecha entre el discurso oficial y la realidad presupuestal. Mientras el Minedu insiste en que la calidad es prioritaria, miles de jóvenes ven frustradas sus expectativas frente a la promesa incumplida de 20.000 becas. El contraste entre compromiso institucional y recorte financiero deja en evidencia la urgencia de una reforma para recuperar la confianza de la ciudadanía.