OPINIÓN | Luis Ángeles Laynes: "¿Cómo frenamos la segunda ola?

Los números de contagios y fallecidos en lo que va de la segunda ola de la pandemia del coronavirus nos muestran la cruda realidad de que las medidas dispuestas por el Gobierno no están dando resultados. Pero, además, la resistencia de mucha gente a acatar las restricciones avizora que la cuarentena no dará los resultados que se esperan y que se será necesario adoptar acciones inmediatas e inteligentes para frenar al virus.

Ayer, el vicedecano del Colegio Médico del Perú, Ciro Maguiña, puso el dedo en la llaga y advirtió que estamos ante una “cuarentena chicha” por el aumento de la población en las calles y el elevado tráfico que puede conducirnos a una situación de “desastre nacional”.

La situación actual de la pandemia no solo requiere de medidas restrictivas porque desde el año pasado se ha demostrado que la gente no las cumple. Y es que lamentablemente, la mayoría de nuestra población es informal, vive del día a día porque no tienen empleo y se ve obligado a salir a las calles en busca del sustento para sus familias.

Muchas familias no tienen qué comer y ni siquiera las ollas comunes que no son suficientes, porque apenas les alcanza para alimentarse una vez al día. Urge pues que el aparato estatal llegue a estos peruanos para abastecerlos de víveres que les permita paliar el hambre.

Es evidente que será necesario ampliar la cobertura del bono económico para más peruanos, pero al mismo tiempo no desatender a los compatriotas que sufren también la crisis de la pandemia y necesitan dinero para alimentarse. Nos referimos a los aportantes de la ONP que siguen esperando la devolución de S/4,300 que dispone la ley aprobada por el Congreso y que desde hoy queda en manos del Tribunal Constitucional, o los millones de deudores que siguen padeciendo el abuso de los bancos, pero a los que el Gobierno ayer les dio la espalda al observar la ley contra a usura.

Pero en el lado de la salud, también urge tomar acciones urgentes para atender a los pacientes. No hay oxígeno, tampoco camas UCI y falta personal médico para atender en ellas, hay que activar y reforzar los centros de primer nivel de atención. Sí, es herencia del gobierno de Martin Vizcarra que además nos dejó sin vacunas, pero como el mismo presidente Francisco Sagasti lo dijo, no hay que mirar atrás, buscando culpables, sino hacia adelante para buscar soluciones. Pues entonces, actúe ya, porque la terrible realidad necesita acciones urgentes e inteligentes.

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