¿Por qué aparecen hormigas en casa durante el invierno?: Aquí te contamos como alejarlas sin químicos
Las hormigas son visitantes frecuentes en los hogares, y su aparición puede ser desconcertante. Aunque tu casa esté impecable, estos insectos tienen un agudo sentido del olfato y una habilidad extraordinaria para detectar las más mínimas partículas de alimento. Además, pueden aprovechar cualquier rendija o fisura para ingresar y recorrer cada rincón.
Lejos de ser un hecho casual, su presencia está ligada a necesidades básicas de la colonia, como la búsqueda de alimento, agua y refugio. Por ejemplo, en épocas de lluvia suelen buscar espacios secos y durante el invierno necesitan calor. Las grietas en paredes, ventanas y pisos se convierten en accesos ideales, sobre todo si hay un nido cercano en el jardín o el patio.
¿Por qué las hormigas se sienten atraídas a tu casa?
Las hormigas son oportunistas y pueden detectar restos de comida invisibles al ojo humano. Los alimentos azucarados y grasos son especialmente irresistibles para ellas. Además, la humedad acumulada en baños, cocinas o zonas con tuberías defectuosas puede servirles de fuente de agua y motivar su ingreso.
Si encuentran un ambiente cómodo y con recursos, no solo ingresan temporalmente, sino que podrían instalarse y formar una nueva colonia. Muchas veces, esto sucede cuando la colonia original explora nuevos territorios o necesita expandirse para sobrevivir.
¿Cómo evitar que se instalen sin usar químicos?
La limpieza es la primera línea de defensa. Guardar los alimentos en envases herméticos, limpiar superficies y evitar restos de comida expuestos reduce el atractivo para las hormigas. También es fundamental reparar fugas y controlar la humedad.
Para bloquear sus accesos, se recomienda sellar grietas y colocar burletes en puertas y ventanas. Asimismo, limpiar las rutas que utilizan con vinagre y agua elimina los rastros químicos que guían a otras hormigas.
Entre los métodos naturales más populares destacan el ajo, cuyo fuerte olor actúa como repelente; las cáscaras de naranja, que resultan molestas para ellas; y el bicarbonato de sodio, que puede espolvorearse en los caminos para interrumpir su paso. El arroz y la mezcla de levadura con azúcar son otras alternativas mencionadas, aunque su efectividad no está plenamente comprobada.
Si la infestación persiste, localizar el nido y eliminarlo puede ser la única solución definitiva. En casos severos, se recomienda acudir a un especialista en control de plagas. Las hormigas cumplen funciones ecológicas importantes, pero su presencia dentro del hogar puede convertirse en un problema.
Identificar las causas y aplicar medidas preventivas y naturales permite mantenerlas a raya, proteger tu espacio y evitar el uso de productos químicos agresivos. Con constancia y estrategias adecuadas, es posible lograr un ambiente libre de hormigas de manera segura y sostenible.