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Tensión bélica

EE.UU. autoriza a Ucrania a atacar con misiles de largo alcance en territorio ruso bajo control del Pentágono

El presidente de EE.UU., Donald Trump, autorizó a Ucrania a realizar ataques de largo alcance en territorio ruso bajo supervisión del Pentágono.
EE.UU. autoriza a Ucrania a atacar con misiles de largo alcance en territorio ru (El País)
29-09-2025

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, autorizó a Ucrania a realizar ataques de largo alcance dentro del territorio ruso, siempre bajo la supervisión directa del Pentágono. 

La decisión fue confirmada por el enviado especial estadounidense para Ucrania, Keith Kellogg, durante una entrevista en la cadena Fox News. 

Según el funcionario, la autorización no será automática, sino que dependerá de la evaluación individual de cada operación, con la última palabra en manos de Trump.

Este anuncio representa un cambio notable respecto a meses anteriores, cuando el propio Trump había expresado su molestia por ataques ucranianos contra infraestructura rusa. 

En agosto, llegó a manifestar su enfado ante el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, por la ofensiva con drones contra el oleoducto Druzhba. 

Sin embargo, en las últimas semanas el mandatario estadounidense ha endurecido sus críticas contra Vladimir Putin, al declarar que no aprueba "en absoluto" las acciones militares rusas.

Misiles Tomahawk y apoyo internacional en debate

Durante la reciente Asamblea General de la ONU, el presidente ucraniano Volodimir Zelensky solicitó personalmente a Trump misiles de crucero Tomahawk, considerados clave para operaciones de precisión en profundidad. Aunque Washington aún no ha tomado una decisión definitiva, el vicepresidente estadounidense JD Vance confirmó que la propuesta está en evaluación.

Kellogg subrayó que la entrega de este tipo de armamento avanzado y su uso requiere coordinación estrecha con los aliados occidentales, en un contexto de creciente tensión militar en Europa del Este. 

La situación se agravó después de que drones rusos ingresaran en el espacio aéreo polaco el 10 de septiembre, obligando a la defensa antiaérea de Varsovia a intervenir por primera vez en tres años de guerra. Semanas después, tres aviones militares rusos violaron el espacio aéreo de Estonia, un hecho que incrementó la preocupación de la OTAN.

Aunque Ucrania ha desarrollado sus propios misiles y drones de largo alcance, sigue dependiendo del apoyo militar extranjero para ejecutar operaciones estratégicas contra Moscú. Washington, por su parte, mantiene una política de control sobre cada ofensiva, lo que refleja un delicado equilibrio entre el respaldo militar y la contención de una escalada mayor.

Intensificación de ataques y respuesta internacional

Mientras se debate el envío de misiles Tomahawk, Ucrania fue blanco de un ataque masivo con drones y misiles rusos que se prolongó por 12 horas, dejando al menos cuatro víctimas mortales en Kiev, incluida una niña de 12 años. El ejército ucraniano reportó que el país recibió 595 drones y 48 misiles en una sola jornada, de los cuales la mayoría fue interceptada, aunque 31 drones y cinco misiles lograron impactar en distintas regiones.

Ante esta ofensiva, Polonia desplegó aviones de combate para proteger su espacio aéreo, y la OTAN denunció nuevas violaciones rusas contra la seguridad regional. Zelensky, tras condenar la estrategia de Moscú de atacar infraestructuras civiles y energéticas, sostuvo conversaciones con aliados como el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, y los líderes de Finlandia y Noruega.

El conflicto muestra que, pese a las pérdidas reportadas por el Estado Mayor de Ucrania en las filas rusas —más de un millón de bajas desde 2022—, Moscú mantiene su ofensiva sin señales de retroceso diplomático. Para Kiev la posibilidad de contar con misiles de largo alcance autorizados por Washington, EE.UU., abre un nuevo escenario en la guerra, que dependerá de la cautela política de Trump y la coordinación internacional.