Delia Espinoza sobre José Jerí y su eventual retorno como fiscal de la Nación: "No prometo no tocar a nadie"
Luego de su audiencia en la subcomisión de acusaciones constitucionales realizada este martes 25 de noviembre, la fiscal suprema Delia Espinoza respondió a las dudas sobre su posible retorno al mando del Ministerio Público. La pregunta que flotaba era si su regreso podría generar tensiones con el Ejecutivo, encabezado por el presidente José Jerí, o si existiría algún tipo de pacto de no confrontación.
Desde el Congreso, Espinoza fue clara al señalar que no comparte esa visión. Explicó que siempre ha mantenido una relación institucional con el Ejecutivo, participando en reuniones y coordinaciones que corresponden a sus funciones. Según ella, cualquier comentario sobre tensiones responde más a percepciones ajenas que a la realidad.
"Yo no sé a qué tensión se refieren. Yo siempre he coordinado y me he presentado a todas las reuniones que, de acuerdo a nuestras funciones, nos corresponde asistir y dialogar para llegar a un punto que favorezca a la población. Todo lo demás que digan los señores son sus pareceres".
Convicciones y atribuciones
La fiscal suprema también dejó en claro que no aceptará condicionamientos que limiten su labor. Parafraseando su postura, Espinoza sostuvo que no puede comprometerse a "no tocar a nadie", porque hacerlo sería renunciar a sus atribuciones constitucionales y traicionar tanto a la población como a sus convicciones. Luego lo expresó con firmeza:
"Yo no voy a prometer que no voy a tocar a nadie, porque eso sí sería claudicar y renunciar a mis atribuciones constitucionales y no voy a traicionar a la población, mucho menos a mis convicciones".
Delitos, no personas
Finalmente, Espinoza subrayó que su trabajo no se centra en individuos, sino en los hechos delictivos. En su interpretación, la justicia debe perseguir conductas y no nombres propios. Lo resumió en una frase:
"Yo no persigo a las personas, yo persigo los delitos".
Con ello, buscó disipar cualquier sospecha de que su eventual retorno a la Fiscalía de la Nación podría estar marcado por rivalidades políticas. Así, las declaraciones de Delia Espinoza reflejan una postura de independencia y compromiso institucional.
Al descartar tensiones con el presidente Jerí y reafirmar que su labor se centra en perseguir delitos, la fiscal suprema marca distancia de cualquier pacto político y reivindica la autonomía del Ministerio Público. Su mensaje apunta a que la justicia no debe ser rehén de intereses personales ni de presiones externas.