¿Tener un perro reduce los niveles de estrés?: Innovador estudio descubre la verdad detrás de ello
Los perros se han convertido en una compañía vital para los seres humanos. En diversas ocasiones se desempeñan como sostén emocional cuando una persona atraviesa un mal momento o también son testigos de situaciones amenas.
En tal sentido, el interés por conocer los efectos de estos animales en el bienestar de las personas trascendió. Por ello, hoy son objeto de estudio que preocupa a profesionales de medicina, psicología o terapia ocupacional, por citar algunos ejemplos.
Una reveladora investigación
Un reciente estudio de la Universidad de Denver, en Estados Unidos, reveló un beneficio clave para la salud humana. Resulta que la interacción con caninos no solo abarca un consuelo emocional, sino que ayuda a mejorar la respuesta fisiológica del cuerpo ante el estrés.
Kevin Morris y Jaci Gandenberger, líderes de la investigación, analizaron cómo la presencia de estas mascotas influye en dos sistemas esenciales del cuerpo humano que guardan relación con el estrés. Estos son el eje HPA, que regula los niveles de cortisol y el eje SAM, responsable de la reacción de 'lucha o huida' para afrontar amenazas.
¿En qué consistió la investigación?
El estudio científico congregó a 40 personas quienes fueron sometidas a situaciones estresantes, como por ejemplo resolver cálculos bajo presión o expresarse ante el público.
Todo este proceso duró el período de 15 minutos. Cabe señalar, que algunos de los participantes realizaron dichas acciones en compañía de sus perros. Mientras que el resto en solitario.
¿Cuáles fueron los resultados?
Los resultados del estudio reflejaron que aquellas personas que estuvieron acompañadas de sus mascotas tuvieron una menor frecuencia cardíaca. Además, presentaron niveles de cortisol más controlados en la sangre. Asimismo, existió un incremento de la enzima alfa - amilasa, activación positiva del eje SAM que es beneficiosa para la salud.
Por su parte, aquellos participantes sin perro experimentaron una respuesta nula del eje SAM. Ello hizo deducir a los investigadores que estas personas presentarían una posible desregulación a estrés crónico e inclusive al trastorno estrés postraumático (TEPT).
Debido a ello, el citado hallazgo sugiere que la presencia de estos amigos de cuatro patas ayuda a que el cuerpo de los seres humanos a canalizar mejor las amenazas percibidas, preparándola para combatirlas de forma más efectiva.
De esta manera, este reciente estudio científico de la Universidad de Denver, de Estados Unidos, reveló que los perros podrían contribuir a regularizar el estrés en las personas, demostrando el beneficio de su compañía.