02/07/2019 / Exitosa Noticias / Uncategorized / Actualizado al 09/01/2023
Especialistas en alimentación nos recomiendan incorporar a nuestra dieta diaria la quinua, la kiwicha, la kañihua y el tarwi, los denominados “granos de los dioses incas”, por su alto valor en proteínas y vitaminas.
LA QUINUA:
Fue venerada por los incas porque la consideraban como un alimento sagrado. Tiene entre sus componentes vitaminas y nutrientes de significativa relevancia para nuestra alimentación. Una porción de 3.5 onzas equivale a 14 gramos de proteína y preparada en jugos, guisos o postres, adquiere un delicioso sabor. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura en el año 2013 declaró el Año Internacional de la Quinua, colocándola en un sitial preponderante en la exclusiva gastronomía mundial. Para prepararla, se cocina a fuego lento una taza de quinua por dos de agua) por 12 o 15 minutos y cuando esté traslúcida es señal que ya está sancochada. Se puede preparar en dulces o en estofados, sopas, ensaladas, hamburguesas y si queremos preservarla, se mantiene en un envase de vidrio cerrado hasta por una semana en la refrigeradora.
LA KIWICHA O AMARANTO:
No solo tiene un valor nutritivo sino también medicinal, al contener calcio, potasio, fósforo, zinc. Su contenido de aminoácidos es favorable para el desarrollo cerebral; adicionalmente es un ideal para disminuir los dolores menstruales y reumáticos. Una de sus propiedades, la Lisina, ayuda a disminuir los niveles de colestero Cabe destacar que cien gramos de este alimento es equivalente al doble de proteínas que se obtienen por tomar leche. Para obtener un delicioso desayuno de Kiwicha, utilizamos leche, hojuelas de kiwicha, azúcar rubia, agua para hervir, clavo de olor y canela. Se hierve el agua con canela y clavo de olor, se agrega la hojuela (previamente diluida en agua), el azúcar y se mueve constantemente. Antes de bajarlo del fuego se agrega la leche.
EL TARWI
Se destaca por sus propiedades nutritivas de Omega 3 y 6 y aldegustarlo en cualquiera de sus múltiples variedades nuestro organismo absorberá el 90% de su valor proteico. Se consume en ensaladas y guisos, y una de las recetas que ha alcanzado popularidad es la Huancaína de Tarwi. Remojar el Tarwi o “chocho”, como también se le conoce, lavarlo cinco o seis veces, cocinar con agua dos o tres veces más, una vez que esté hervido se deja enfriar para posteriormente licuarlo con ají
amarillo (previamente con sal, ajo y aceite). Se le agrega queso y una generosa porción de leche. Acompañar con papas sancochada y decorar con lechuga y rodajas de huevos sancochados.
