26/09/2019 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
“Largo pétalo de mar” es una frase maravillosa y sugerente tomada de un verso de Pablo Neruda que se refiere al Winnipeg, un navío fletado por el poeta para librar a más de dos mil españoles refugiados en Francia, después de la Guerra civil española, y poder darles en su país, Chile, paz y libertad.
Isabel Allende, reconocida escritora, narradora, sin duda entre las más destacadas de esta América hispana, en su género y su posición social, nos sorprende con este relato e ilumina el pensamiento para reconocer que sucesos vividos en algunos, o en la memoria de recuerdos en otros, o información en nuevas generaciones, el mundo sigue siendo igual en cuanto a políticas y sufrimientos de gente que cree en la moral y la igualdad.
La escritora, limeña de nacimiento, pues sus padres cumplían una misión diplomática en nuestra nación cuando nació, nos involucra en esta novela Largo pétalo de mar (Buenos Aires: Sudamericana, 2019) en la Guerra civil española y en el golpe a la democracia en Chile, su país. Franco, en España, destruyó la República, y Pinochet la democracia en nuestro vecino país del sur. Sucesos trágicos que costaron tantas vidas y sufrimientos.
En la novela, una familia catalana, los Dalmau, llegan en el Winnipeg, ese pétalo perfumado de esperanzas del poeta Pablo Neruda, a Valparaíso, la América, para poder vivir, después de tantas tribulaciones de esa guerra entre hermanos que fue ese conflicto en España antes de la Segunda guerra mundial. Encuentran algarabía en su recibimiento y él, médico, y ella artista, pianista, son recibidos en la sociedad. Ese conjunto de gente que con tanta desigualdad a sus compatriotas vive en otra realidad.
Víctor Dalmau y Roser Bruguera, dos conciencias diferentes unidos en pensamientos, en recuerdos y alejados en la cotidianidad de una vida marital, a la larga se unen en el amor y se produce efusión del reconocimiento latente de la vida en común.
La narradora hace una comparación entre situaciones y crea un hilo conductor entre ideas y pensamientos para llegar a la conclusión de que, en la vida, con todos sus recovecos de sufrimientos, ilusiones y esperanzas se llega a la plenitud y a la felicidad en el amor de los seres queridos, a la familia que es la defensa de uno mismo, los parámetros del ser.
En Largo pétalo de mar Isabel Allende, nuestra querida escritora, se aleja de la fantasía y se alimenta de la realidad. El título de esta novela es sublime, un verso de Neruda, como dije al inicio, que la escritora conjuga con el reflejo de la historia y la vida actual.
