OPINIÓN | Jaime O. Salomón: "Cierre de brechas"

POR JAIME O. SALOMÓN*

Para manejar la vida se debe trazar un plan que nos lleve a donde queremos estar en el futuro. Para manejar una organización (pública o privada) se requiere gente que sepa manejar su vida. Igual para manejar un grupo de empresas, un ministerio, una gobernación o una alcaldía.

El buen gobierno corporativo es respetar las instancias de una organización, donde el accionista (propietario) como ente máximo coordina con un directorio profesional (dirección) y este último con la gerencia general (gestión).

Se debe tener claro cuál es la perspectiva de la organización, fortalecer la capacidad estratégica, enfocarse en generar valor al cliente, utilizar información validada, ser transparentes, analizar los riesgos y generar desarrollo social.

Si bien las empresas del Estado se enfocan en rentabilidad económica, debieran re-direccionar su enfoque hacia la rentabilidad social y el cierre de brechas. Existen zonas en nuestro país que requieren inversión, pero no se hacen al no generar utilidades económicas; pero si se midiera por rentabilidad social permitiría que la economía se dinamice en esas zonas y generando identidad nacional, sobre todo en zonas de frontera.

Los principios de buen gobierno corporativo más reconocidos son los elaborados por la OCDE, por el de Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), CONASEV y FONAFE. Todos coinciden con la teoría, pero en la práctica se requiere algo más; es necesario que las organizaciones cuenten con un equipo coordinado que sepa dirigir, cual saber ajustar constantemente las velas para que la nave llegue al puerto deseado.

Un buen gobierno corporativo reduce los riesgos. Y es que el Perú, al estar afecto a las influencias externas, podría sufrir por la crisis económica mundial que se avecina como consecuencia de las pugnas entre el dólar y el petro-yuan (parte visible de la lucha de dos grupos por mantener la hegemonía geopolítica del mundo).

Para dirigir y gestionar organizaciones se requieren personas con conocimiento y experiencia en alta dirección. Dicen que la ignorancia es atrevida, cuando en realidad la atrevida es la persona que justifica su ignorancia (o falta de conocimiento) en alta dirección (propiedad, control, dirección y gestión); que cual síndrome de “Dunning-Kruger” no reconocen sus limitaciones ni las habilidades de los demás.

La educación permite lograr mejor calidad de vida en las personas, generando desarrollo, crecimiento social y reducción de las brechas sociales.

Si el gobierno corporativo de una organización funcionase de acuerdo a las reglas, otra sería la realidad de las organizaciones de nuestro país. Hoy son simplemente eficaces (aprobar con 11) cuando debieran ser eficientes: lograr las metas haciendo el mejor uso de los recursos (aprobar con 20).

Trabajemos por el Perú.

Ciudadano, emprendedor y docente.

Fanpage: Jaime Salomón

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