31/07/2021 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Las inversiones son esenciales para un adecuado crecimiento económico. La inversión pública y privada se convierten en uno de los principales ejes de la economía peruana. Sin embargo, la actual incertidumbre política afecta considerablemente las decisiones de inversión en nuestro país.
El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) anunció que la inversión privada podría crecer 15.5% en el 2021, pero dicho crecimiento estaría sujeto a las decisiones que realice el gobierno entrante. Esto se debe a la actual incertidumbre que el sector privado percibe, al observar la gran diferencia entre la línea de ruta inicial que se presentó en la primera vuelta en su ideario y el nuevo plan del bicentenario de Perú Libre.
En el primer trimestre del año, la inversión privada creció 37%, respecto del 2020, gracias a las mayores importaciones de bienes de capital, utilizados para la producción de productos y servicios en el Perú. En la actualidad, uno de los sectores que más está impulsando el crecimiento de la inversión privada es construcción, el cual ha crecido un 257.04% en mayo.
Sin embargo, esta línea de crecimiento podría verse afectada negativamente si se cambian las reglas de juego a último momento. Como consecuencia, se podría observar un recorte sustancial de los flujos de inversión privada, lo que generaría un retroceso en los avances de recuperación económica.
En el caso de la inversión pública, el MEF indica que la ejecución de esta inversión, durante el primer semestre del 2020, fue de S/15,776 millones, la más alta de los últimos 20 años. Esta cifra es superior en 36% a la ejecutada en el primer semestre del 2018, siendo dicho año el que mayor ejecución de inversión pública registró en el período 2001-2020, según el MEF.
Para Waldo Mendoza, ministro de Economía y Finanzas, la inversión pública será un dinamizador de la economía en este 2021. La ejecución de obras públicas tiene un efecto multiplicador, pues incrementa la demanda de mano de obra directa e indirecta, generando una mayor actividad económica para los distintos sectores.
Las elecciones presidenciales ya culminaron y aún se mantiene la incertidumbre de lo que se hará en materia económica durante los próximos años. En estos momentos es necesario que el Estado sea más comunicativo y que el nuevo gobierno se comprometa a seguir una línea de política económica que permanezca durante sus 5 años de gestión.
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