17/10/2020 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
La pandemia del coronavirus ha llevado a que la gran mayoría de países del mundo entren en un periodo de recesión económica. La pregunta que todos nos hacemos es la siguiente: ¿Cuándo nos recuperaremos del impacto económico que ha generado el Covid-19?
En una reciente entrevista, el presidente de la República aseguró que el Perú crecería un 10% durante el 2021. Para poder alcanzar esta cifra será primordial la recuperación del empleo formal, la reactivación de las mypes y alcanzar la confianza empresarial.
La caída de la producción nacional, para el 2020, se estima en alrededor de -12%, el desempleo podría elevarse hasta 13.5% y la pobreza 37.7%, de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Las últimas cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) señalan que, en el trimestre de junio, julio y agosto del presente año, 3.6 millones de personas se encontraban empleadas. Esta cifra muestra una disminución del empleo formal de -26.8%, respecto del 2019. Es conveniente mencionar que se ha mostrado una recuperación del 23% en comparación con el trimestre móvil anterior, comprendido por los meses de mayo, junio y julio.
La reactivación de las mypes es fundamental por dos razones: En primer lugar, las mypes son las principales generadoras de empleo, en Lima Metropolitana dan empleo a alrededor del 70% de la población económicamente activa (PEA) ocupada; y a nivel nacional representan un 80%.
En segundo lugar, muchas de las mypes formales del país, sin duda, han cerrado sus actividades debido a no poder cumplir con sus obligaciones financieras y con terceros. La reducida cobertura financiera temprana a este sector empresarial vulnerable ha desencadenado no solo una fuerte pérdida de empresas y empleos, sino un impulso hacia la informalidad.
Un entorno empresarial en donde la ayuda no llega a tiempo, un tipo de cambio que está rozando los S/ 3.60 y un ambiente político agresivo, próximo a las elecciones del 2021, deterioran la confianza empresarial para realizar inversiones.
Para salir adelante, la política económica debe ir de la mano con las políticas sociales para evitar el incremento de la pobreza en el país. La economía no solamente se sustenta con las empresas, sino con la población que adquiere bienes y servicios. Por ello, la economía peruana se demorará, aproximadamente, tres años en recuperar el nivel alcanzado en el 2019.
