OPINIÓN | Lewis Mejía: "Humedad y bajas temperaturas"

Cuidado, las bajas temperaturas de esta temporada invernal nos presentan algunos desafíos que debemos tener en cuenta como medidas de prevención ante los accidentes.

Empezando por la fina garúa que desde las madrugadas se cierne no solo sobre Lima sino sobre otros distritos de la costa, especialmente hacia el sur de nuestro país.

El amanecer lluvioso presenta un peligro ante las instalaciones eléctricas defectuosas o informales que, lamentablemente, no son escasas entre nuestros distritos.

Si en tu vivienda hay cables recorriendo el techo al aire libre, ten cuidado, así los hayas cubierto con plásticos porque precisamente allí es donde se puede acumular el agua y darte una amarga sorpresa.

Por eso, este sábado a partir del mediodía, sería bueno que busques un electricista profesional para que ubique y resuelva aquellas conexiones mal hechas que cualquier día podrían provocar un corto circuito.

Todo está húmedo en estos días, incluyendo las rejas de puertas y ventanas, así que asegúrate que ninguna fuente eléctrica esté en contacto con el metal para evitar una sorpresiva descarga.

Recuerda que la corriente eléctrica puede causar un paro cardíaco debido al efecto eléctrico sobre el corazón, la destrucción de músculos, nervios y tejidos cuando atraviesa el cuerpo, y quemaduras térmicas.

De igual manera, si posees iluminación tipo fluorescentes o focos ahorradores a la puerta de tu casa o en el patio interior, verifica que tengan la cubierta necesaria para que el agua de la lluvia no les impacte directamente.

El timbre y todas las llaves de luz de la casa, así como los tomacorrientes, deben ser revisados; y si están rotos o rajados, o parecen chamuscados con manchas de hollín, es mejor que los reemplaces.

¿Te gusta levantarte por las noches para picar algo de la refrigeradora? Antes de dar un paso más, mejor ponte unas sandalias o zapatillas secas, así evitarás cualquier accidente al tocar las partes metálicas.

De igual manera y en lo posible, trata de dar de baja aquellos electrodomésticos demasiado antiguos que muestran el paso del tiempo y pueden ser peligrosos.

Sobre todo, los que han requerido muchas reparaciones, presentan olor a quemado al utilizarlos, o exhiben partes derretidas, puede ser que su ciclo de vida útil haya terminado.

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