09/12/2020 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
La renuncia de Cluber Aliaga al cargo de ministro del Interior han dejado sobre el tapete una serie de cosas que requieren ser esclarecidas, por el bien del país y del mismo gobierno transitorio que preside Francisco Sagasti.
Quizá la que está clara es la razón de su renuncia, las declaraciones que formuló la noche del domingo de oposición al pase a retiro de 18 generales de la Policía Nacional, tildándolas de medida apresurada y que su legalidad estaba en estudio. Era obvio que ello iba en contra de las medidas adoptadas por el gobierno de Sagasti y por tanto su salida era inminente.
Pero el ahora exministro afirmó también que en las últimas manifestaciones de protesta como la de los jóvenes contra la asunción de mando de Manuel Merino tras la vacancia de Martín Vizcarra, en la que fallecieron Inti Sotelo y Bryan Pintado, y las de los trabajadores de las agroexportadoras en la que también murió Jorge Muñoz Jiménez, hubo infiltrados que atacaron a la policía para provocar la violencia que tuvo los lamentables resultados.
Esta última declaración de Cluber Aliaga es muy peligrosa, si tomamos en cuenta que la semana pasada el presidente transitorio Francisco Sagasti declaró a la prensa extranjera que enfrenta intentos de desestabilización por parte de intereses particulares y políticos que presionan en distintas direcciones a las planteadas por su gobierno.
Según el exministro, no se puede aún determinar a los responsables de las muertes porque todo está en proceso de investigación.
Pues bien, estas investigaciones deben realizarse con la debida celeridad y hasta las últimas consecuencias, para dar con los culpables. Si fue la Policía tras la violenta reacción en la marcha del 14 de noviembre, por órdenes superiores como han denunciado algunos sectores, o los infiltrados a los que alude Cluber Aliaga. Sea quien sea debe pagar por estos hechos.
De otro lado, el presidente Sagasti no debe dejar a medias sus declaraciones. A la prensa extranjera solo le dijo que “es claro que algunos grupos han perdido poder y espacio con este cambio de gobierno en las últimas dos semanas”. Debe pues decir con todas sus letras quiénes son esos grupos, porque pretender desestabilizar su gobierno no solo lo afecta a él sino a todo el sistema democrático del país.
Los peruanos tienen derecho a saber toda la verdad. No se puede tirar la piedra y esconder la mano
