12/11/2021 / Exitosa Noticias / Actualidad / Actualizado al 09/01/2023
Cuando las clases presenciales se trasladaron hacia la virtualidad en marzo de 2020 ante el avance del COVID-19 en el país, Luisa Velásquez y sus vecinas del asentamiento humano Nadine Heredia, en Villa María del Triunfo, se dieron cuenta de un problema en común: la falta de conectividad y equipos tecnológicos para que sus hijos accedan a las clases virtuales.
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A Luisa le apenaba que sus cuatro menores hijos se atrasen. Apenas contaba con un celular y no se daba abasto para que todos ingresen a sus clases. A ese problema hay que sumarle la falta de conectividad, pues, a pesar de recargar su celular para contar con datos, en su zona, ubicada en lo más alto de VMT, no llega la señal de internet móvil.
Esta madre de familia no se quedaría de brazos y se pondría de acuerdo con sus vecinas para buscar un espacio común en la zona donde haya mejor recepción de internet, a fin de instalar un local temporal para que los escolares de la zona puedan acceder a sus clases virtuales.
“La idea surgió al ver a todas las mamitas que no tenían internet. La situación misma nos ha puesto este reto”, detalla a Exitosa Perú.
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Tras horas de diálogo y gracias a un trabajo conjunto, lograron implementar el espacio denominado 'Aula de Emergencia'. Pidieron donaciones y todos colaboraron. Un párroco local donó una computadora y un módem, mientras que el resto de vecinos aportaron mesas y sillas.Poco a poco se fue pasando la voz de que existía un 'Aula de Emergencia' en el AA.HH. Nadine Heredia. Niños de otras zonas han comenzado a acudir ante la carencia de equipos tecnológicos. Luisa Velásquez, quien no es profesora ni cuenta con estudios universitarios, pero quiere 'enseñar lo poco que sabe, está dispuesta a recibirlos.
“Yo no soy una maestra ni una profesora, solo soy una ama de casa, pero me nace ayudarles y enseñarles lo poquito que he aprendido”, dijo.
Luisa quiere apoyar a todos, pero para hacerlo necesita más equipos como computadoras, televisiones, tablets, sillas y mesas. Ella, junto a sus vecinos, ha emprendido una gran labor social y nos demuestra que los peruanos podemos hacer de todo si nos unimos. Si usted desea apoyar, se pude comunicar al siguiente número: 978 291 280.
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