14/04/2021 / Exitosa Noticias / Columnistas / Actualizado al 09/01/2023
Vivimos elecciones el domingo con muchos, tal vez demasiados, instantes para no recordar y, otros, para aplaudirlos.
Quien no se pone de pie y aplaude a los abuelos con una sola orden: estar a las siete de la mañana, pues serían los primeros en ser atendidos. Ellos estuvieron, pero, desgraciadamente, los integrantes de las mesas de sufragio no llegaron y, a muchos de ellos, se les vio hasta pasado el mediodía, deambulando por los recintos de sufragios.
Los abuelos demostraron querer sufragar y cumplir con la ley. Lamentable, muchos miembros de mesa fueron IRRESPONSABLES con mayúscula. No concurrieron a la cita obligatoria.
Muchos, de este error, intentaron culpar a los organizadores de la actividad eleccionaria. No. Esa fue culpa única de los miembros de mesa.
Hay también un grupo, digno de ser destacado, como fueron esos jóvenes concurrentes, al llamado, para sustituir a los faltones quienes, deben ser sancionados con todo lo que la ley dispone para estas situaciones. Esos jóvenes merecen todos los elogios posibles.
Un caso para no dejar de contarlo: un joven fue designado miembro de mesa. Concurrió y faltaron los miembros. En la misma mesa votaban sus hermanos. Los llamó y pusieron en actividad el lugar. No a todos los muchachos se les puede criticar, en la Villa del Señor, de todo hay.
Muchos de los errores, de primera hora, intentaron cargárselos a la Oficina Nacional de Procesos Electorales. Una injusticia. Los integrantes de las mesas sabían cuáles eran sus responsabilidades y no respondieron a ellas.
Los comicios han dejado enseñanzas. Eso servirá, seguramente, para el 6 de junio, oportunidad en que se realizará la elección, entre los dos primeros, del domingo pasado.
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