19/01/2021 / Exitosa Noticias / Edic. impresa / Actualizado al 09/01/2023
Con la llegada del verano le decimos adiós a los zapatos cerrados y le damos la bienvenida a las sandalias para lucir nuestros pies y darnos comodidad y frescura al andar. Sin embargo, las elevadas temperaturas, la excesiva sudoración, el calzado inadecuado y hasta una mala higiene pueden traer una serie de problemas.
Hay que entender que la piel de los pies es diferente a la del resto del cuerpo, es más gruesa y tiene más células adiposas para soportar el peso del cuerpo al caminar. Esto también hace que se reseque con mayor facilidad que otras zonas, en especial en esta época. Por esta razón, aquí te mostramos cómo cuidarla.
1.- Hidratación diaria: Aplicar crema hidratante después de ducharte, de preferencia antes de dormir, y masajear por unos minutos para descargar tensiones musculares. No cubrir con un calcetín tras la aplicación.
2.- Calzado adecuado: Las sandalias deben tener tiras para ofrecer una mejor sujeción a tu pie. Son ideales para evitan el contagio de hongos en aguas estancadas (piscinas y playas). No se aconsejan para trayectos largos.
3.- Limpieza y cuidado: Seca a profundidad tus pies después de la ducha, en especial entre los dedos y la zona de las uñas. También debes cortar las uñas dándoles una forma recta y sin meterte en las esquinas.
4.- Protector solar: Los pies quedan expuestos al sol con las sandalias, así que requieren de una adecuada protección. Se recomienda aplicar bloqueador solar y evitar las horas de mayor exposición al sol.
5.- No abusar del pintauñas: El uso de los llamados “esmaltes permanentes”, es decir, los productos que son difíciles de quitar y que, en consecuencia, debilitan mucho las uñas. Este compuesto también agrava la presencia de hongos.
