18/12/2025 / Exitosa Noticias / Amenidades / Actualizado al 18/12/2025
En Perú, la Navidad no solo es sinónimo de luces, villancicos y cenas familiares, también es la temporada en la que el panetón se convierte en protagonista indiscutible de las mesas, acompañado de chocolate caliente y pavo al horno.
La tradición está tan arraigada que se repite en hogares, oficinas y celebraciones sociales, consolidando al panetón como el símbolo gastronómico de diciembre. El vínculo del país con este producto es único: Perú lidera el consumo mundial de panetón, con un promedio de 1,1 kilos por persona al año, superando incluso a Italia, su país de origen.
Esta relevancia cultural se mantiene vigente y se refleja también en la conversación digital, donde cada diciembre el panetón vuelve a ser tema central.

Tradición adaptada al calor
Pero hay un detalle que marca la diferencia con otras latitudes: en Perú, la Navidad coincide con el inicio oficial del verano. Mientras en Europa y Norteamérica las celebraciones se acompañan de bebidas calientes y postres de invierno, aquí el calor invita a buscar alternativas más frescas.
La costumbre de comer y beber productos calientes contrasta con las altas temperaturas de la estación, lo que ha impulsado nuevas formas de disfrutar los sabores tradicionales.
Es en este contexto que surge una propuesta innovadora: el helado de panetón, una reinterpretación que mantiene viva la tradición pero la adapta al clima local. Se trata de una edición limitada que conserva las notas clásicas del panetón —naranja confitada, pasas rubias y frutos deshidratados—, trasladadas al formato de un gelato artesanal.
La iniciativa pertenece a Antica Gelateria del Corso, una marca de origen italiano fundada en el siglo XX y con presencia en Lima desde hace tres años. Especializada en gelato elaborado bajo recetas tradicionales, la gelatería apuesta cada temporada navideña por sabores inspirados en clásicos de la gastronomía italiana y festiva.
Como antecedente, en noviembre la tienda sorprendió al público con otra reinvención: el helado de turrón, lanzado a pedido de sus clientes y convertido rápidamente en un éxito.
Ahora, con el gelato di panettone, busca ofrecer una alternativa refrescante que permita disfrutar de la Navidad sin renunciar a la tradición, pero adaptada al calor del verano peruano.
El helado de panetón refleja una tendencia clara: mantener viva la identidad navideña mientras se adapta a los hábitos y temperaturas locales. En un país que consume más panetón que cualquier otro, esta propuesta se convierte en un puente entre la tradición y la innovación, entre el sabor de siempre y la frescura que exige el verano.

