
09/05/2025 / Exitosa Noticias / Crimen / Actualizado al 09/05/2025
El transporte público en Lima continúa siendo víctima de las extorsiones de grupos criminales que operan con total impunidad y agresividad. En esta ocasión, tres unidades de transporte fueron quemadas por miembros de la banda 'Nueva Generación', quienes obligan a los conductores a pagar 100 soles para permitirles trabajar sin problemas.
Incendian buses de transporte público en SJL
El transporte público en Lima vuelve a ser víctima de las extorsiones de organizaciones criminales que imponen su ley con violencia. Tres buses fueron incendiados en un ataque que, según el propietario, habría sido ejecutado por la banda 'Nueva Generación', quienes exigen 100 soles semanales a cada conductor para dejarlos trabajar tranquilos.
El ataque fue en horas de la madrugada, en la zona de Prolongación Santa Rosa Mz. A de San Juan de Lurigancho. Los asientos, tanto del chofer como de los pasajeros, fueron arrasados por el fuego.
Según contó el dueño de los vehículos, los conductores venían pagando 10 soles al día a los extorsionadores durante varios meses, pero al negarse a continuar con esa cuota, las amenazas comenzaron a intensificarse.
Los choferes cuentan que los extorsionadores se suben durante el recorrido, especialmente en la ruta Huáscar-Gamarra, y, armados, les exigen el pago, advirtiéndoles que, si no entregan el dinero, no solo quemarán los buses, sino que también podrían ir tras sus seres queridos.
Transportistas exigen acciones inmediatas
Este atentado refleja una vez más el complicado panorama que atraviesa el transporte público, donde la violencia y las amenazas se han vuelto frecuentes.
Los conductores aseguran que no es la primera vez que ocurre algo similar: hace quince días, otros tres buses estuvieron a punto de ser incendiados, aunque en esa ocasión consiguieron apagar el fuego antes de que se saliera de control.
Por más que los transportistas han reportado estos hechos ante las autoridades, la respuesta ha sido nula. Nadie ha sido capturado y el miedo sigue creciendo. Los conductores aseguran que ya no saben a quién recurrir, pues sienten que no hay protección real frente a las amenazas.
Este atentado se produce a solo días del paro nacional convocado para el 14 de mayo por el gremio de transportistas y otros colectivos, quienes exigen al gobierno de la presidenta Dina Boluarte acciones inmediatas frente a la violencia que se vive día a día, en especial por las extorsiones.
La violencia volvió a golpear el transporte público en San Juan de Lurigancho (SJL), donde tres buses fueron incendiados por criminales. A pesar de las denuncias realizadas, los trabajadores siguen sin respaldo y expuestos a amenazas constantes.