
25/08/2025 / Exitosa Noticias / Judiciales / Actualizado al 26/08/2025
El expresidente Ollanta Humala, investigado por la presunta comisión del delito de lavado de activos, reapareció en una audiencia judicial para defenderse de las acusaciones que lo señalan como un posible prófugo en potencia.
Desde el penal de Barbadillo, el expresidente sostuvo que su permanencia en el Perú responde a una decisión personal ligada al bienestar de su familia.
"Por mis hijos y mi esposa debo seguir acá, defendiendo nuestro honor e inocencia", declaró el líder nacionalista, recalcando que su prioridad es enfrentar los procesos en territorio peruano y no buscar refugio en el extranjero.
Estas palabras se dieron en el marco de la revisión de su pedido de suspensión de ejecución provisional de pena, en la cual el Ministerio Público insistió en que Humala representa un riesgo de fuga debido a sus contactos internacionales.
Respuesta a los señalamientos de la Fiscalía
Con un tono desafiante, Humala rechazó los argumentos fiscales que cuestionan su arraigo laboral y familiar. "¿Por qué tendría que fugarme? Estoy defendiendo mi inocencia. Si hubiera querido asilarme lo hubiera hecho hace tiempo", afirmó.
El expresidente explicó que su situación económica depende únicamente de la pensión militar que percibe, lo que limita sus opciones fuera del país.
"¿Quién me daría trabajo? Como militar solo puedo trabajar en el Ejército Peruano y como político, únicamente en el Perú", argumentó ante los magistrados.
Su defensa legal reforzó esta posición, señalando que no existe sustento sólido para mantener la prisión preventiva, pues el exmandatario no cuenta con los medios ni con la intención de escapar.
Fiscalía mantiene su posición
La Fiscalía, sin embargo, se mostró firme en su pedido de que Humala continúe en prisión preventiva. Durante la audiencia, los fiscales mencionaron incluso su relación con Luiz Inácio Lula da Silva como un posible puente para solicitar protección política en el extranjero.
Ante esta hipótesis, Humala respondió: "Dicen que Lula es mi amigo o mi cómplice. Deben entender que la figura del asilo político existe y es legal". Aun así, enfatizó que nunca recurrió a esa salida porque decidió afrontar los cargos en el Perú.
La última palabra la tendrán los jueces que deberán evaluar si corresponde levantar o mantener la medida cautelar. Hasta entonces, el exmandatario Ollanta Humala seguirá recluido en el penal Barbadillo, utilizando cada audiencia no solo para cuestionar la tesis fiscal, sino también para sostener públicamente que se quedará en el país hasta probar su inocencia.