RADIO EXITOSA 95.5 FM EN VIVO
Política

Alan García: "Dejo mi cadáver como muestra de desprecio a mis adversarios"

La carta que escribió Alan García, fue leída por su hija Luciana, que con voz entrecortada cumplió el último deseo de su padre.

Alan-García
Alan García

20/04/2019 / Exitosa Noticias / Política / Actualizado al 09/01/2023

Superando el profundo dolor ocasionado por la partida de su padre, Luciana García Nores, fue la encargada de dar lectura a la misiva que escribió el expresidente Alan García Pérez, momentos antes de tomar la fatal decisión de acabar con su vida. “Les dejo mi cadáver como muestra de desprecio a mis adversarios”, destacó la carta dirigida a sus hijos.

Durante el velatorio en la Casa del Pueblo y en una decisión tomada en el plano estrictamente familiar, Luciana empezó a leer la carta, que lleva la firma y la huella del exjefe de Estado, y a medida que avanzaba conmocionaba más por el desgarrador relato de su contenido.

“Cumplí la misión de conducir el aprismo al poder en dos ocasiones e impulsamos otra vez su fuerza social. Creo que esa fue la misión de mi existencia, teniendo raíces en la sangre de ese movimiento”, de esa manera se inicia lo que sería la despedida del padre a sus seis hijos y seres queridos.

Con la voz entrecortada y secando las lágrimas que recorrían sus mejillas, continuó: “por eso y por los contratiempos del poder, nuestros adversarios optaron por la estrategia de criminalizarme durante más de treinta años. Pero jamás encontraron nada y los derroté nuevamente, porque nunca encontrarán más que sus especulaciones y frustraciones”.

“Otros se venden”

“No hubo ni habrá cuentas, ni sobornos, ni riqueza. La historia tiene más valor que cualquier riqueza material. Nunca podrá haber precio suficiente para quebrar mi orgullo de aprista y de peruano. Por eso aprendí: otros se venden, yo no”, subraya el manuscrito.

“He visto a otros desfilar esposados guardando su miserable existencia, pero Alan García no tiene por qué sufrir esas injusticias y circos”. “Por eso les dejo a mis hijos la dignidad de mis decisiones; a mis compañeros, una señal de orgullo. Y mi cadáver como una muestra de mi desprecio hacia mis adversarios porque ya cumplí la misión que me impuse”, continuó Luciana García.

“Que Dios, al que voy con dignidad, proteja a los de buen corazón y a los más humildes”, con esta contundente frase se despedida finaliza la carta.

Temas relacionados Alan García Pérez POLÍTICA