04/12/2025 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 04/12/2025
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos realizaron este jueves un ataque contra un presunto barco de drogas en el Pacífico oriental, que dejó como saldo la muerte de cuatro personas a bordo. El hecho fue confirmado por el Comando Sur de EE.UU. a través de una publicación en redes sociales, donde se difundió además un video de 21 segundos mostrando la operación.
Según el comunicado, la embarcación estaba operada por una organización designada como terrorista y transportaba drogas ilícitas en una ruta conocida de narcotráfico.
"La Fuerza de Tarea Conjunta Southern Spear realizó un ataque cinético letal contra un buque en aguas internacionales operado por una Organización Terrorista Designada. La inteligencia confirmó que el buque transportaba narcóticos ilícitos y transitaba por una ruta conocida de narcotráfico en el Pacífico Oriental. Cuatro narcoterroristas a bordo del buque murieron.", señaló la publicación oficial.
Este ataque ocurre mientras el Pentágono enfrenta críticas bipartidistas por un operativo realizado en septiembre contra otra embarcación de narcotráfico en el Caribe.
En ese caso, las Fuerzas Armadas estadounidenses fueron cuestionadas por haber ejecutado ataques adicionales contra los tripulantes sobrevivientes, lo que abrió un debate sobre posibles excesos y violaciones al derecho internacional.
El almirante de la Marina, Frank "Mitch" Bradley, informó a líderes del Congreso sobre aquel incidente, lo que ha intensificado la presión política y mediática en torno a la estrategia antidrogas del Gobierno de Donald Trump.
Crece tensión internacional
La ofensiva antidrogas de EE.UU. se desarrolla en un escenario de alta tensión regional. Los ataques en aguas internacionales han generado dudas sobre la legalidad de las operaciones y el respeto a los protocolos humanitarios.
Organizaciones de derechos humanos y algunos gobiernos latinoamericanos han advertido que estas acciones podrían constituir crímenes de guerra, especialmente si se confirma que hubo ejecuciones de sobrevivientes en operativos anteriores.
Al mismo tiempo, Washington sostiene que la lucha contra el narcotráfico está directamente vinculada a la seguridad nacional y al combate contra organizaciones terroristas que financian sus actividades con el tráfico de drogas.
Este ataque se suma a una serie de operaciones que han colocado al Pentágono en el centro de la polémica. En Estados Unidos, el debate se divide entre quienes apoyan una política de mano dura contra el narcotráfico y quienes cuestionan los métodos empleados, advirtiendo que podrían socavar la legitimidad internacional del país.
Con ello, se marca otro capítulo en la ofensiva antidrogas estadounidense, pero también profundiza las tensiones internacionales sobre la legalidad y proporcionalidad de estas operaciones. Con cuatro muertos y un historial reciente de cuestionamientos, el Pentágono enfrenta crecientes presiones diplomáticas que podrían redefinir el rumbo de su estrategia en la región.

