
01/09/2025 / Exitosa Noticias / Mundo / Actualizado al 01/09/2025
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ofreció este lunes a su homólogo estadounidense, Donald Trump, así como a los Gobiernos de América Latina, la experiencia del país caribeño en la lucha contra el narcotráfico. El objetivo, según explicó, es articular "una sola estrategia" que permita "acabar con el comercio ilegal de narcóticos en el continente".
Supuesta cooperación en la lucha contra las drogas
El mandatario señaló que la Superintendencia Nacional Antidrogas (SNA), los cuerpos policiales y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) están "totalmente a la orden" para coordinar con los países de Suramérica y Centroamérica en la materia.
"Si usted presidente Trump en serio, quiere hablar de una lucha para acabar con el narcotráfico. Venezuela tiene la experiencia, modestamente tenemos la experiencia y los resultados concretos", señaló el presidente de Venezuela.
En paralelo, el gobernante lanzó una advertencia al referirse a las tensiones con Washington, luego de que Estados Unidos desplegara buques militares en el mar Caribe como parte de sus operaciones antidrogas. Maduro afirmó que, de producirse una agresión extranjera, su país entraría inmediatamente en una fase de resistencia armada.
"Si el resto de los países como estamos haciendo con Colombia. Si el resto de los países de Sudamérica y Centro América quieren coordinar una sola estrategia de este tema entre muchos otros que tiene el continente estamos totalmente a la orden", indicó Nicolás Maduro.
Un doble mensaje
El discurso de Maduro combinó dos frentes: por un lado, la propuesta de cooperación internacional para enfrentar el narcotráfico en la región; y por otro, una advertencia firme sobre la capacidad de Venezuela de responder en caso de una intervención militar.
Analistas internacionales señalan que la estrategia del mandatario busca reforzar su imagen de aliado regional en la lucha contra el narcotráfico, mientras, en paralelo, proyecta una posición de resistencia ante lo que considera amenazas externas. De esta forma, el Gobierno venezolano intenta equilibrar su discurso entre la diplomacia y la defensa militar.
En ese sentido, las declaraciones podrían tener un doble impacto: abrir un eventual canal de diálogo en materia de seguridad regional, pero también aumentar las tensiones con Washington, que ha mantenido una política de sanciones y presión hacia Caracas. La respuesta de los países latinoamericanos y de Estados Unidos determinará si la oferta de cooperación se traduce en acciones concretas o si queda enmarcada dentro del clima de confrontación que caracteriza las relaciones entre ambas naciones.
El ofrecimiento de Nicolás Maduro abre un nuevo capítulo en las tensiones diplomáticas de la región. Mientras busca mostrar a Venezuela como un actor dispuesto a contribuir en la lucha contra el narcotráfico, advierte al mismo tiempo sobre una posible confrontación armada en caso de agresión extranjera. El equilibrio entre cooperación y amenaza refleja la estrategia del Gobierno venezolano en medio de un escenario internacional marcado por la desconfianza y la tensión militar.