
23/07/2025 / Exitosa Noticias / Policial / Actualizado al 23/07/2025
La delincuencia no cesa en la capital y la policía sigue sin frenar a los extorsionadores. El último caso registrado ocurrió durante la noche del último martes 22 de julio en el distrito de San Juan de Miraflores, donde unos delincuentes atacaron cinco buses de la Línea D por no paga cupos cuando circulaban por la avenida Canevaro.
Extorsionadores atacaron con piedras y balas
Los presuntos autores de este hecho delictivo aparecieron por la avenida mencionada en motos y algunos a pie. Entre las 10 y las 11 de la noche aparecieron y al ver a las unidades de transporte que cubren la ruta Villa el Salvador-Miraflores, las atacaron sin importarle que estaban con pasajeros abordo, algunos incluso, con menores de edad.
De estos buses, cuatro eran informales y una sola formal. Se reportó un herido. Uno de los conductores de los vehículos afectado relató para América Noticias que al ver a la turba, aceleró para escapar de los extorsionadores. Contó que un colega al verse en el mismo escenario, chocó contra un vehículo menor.
"Yo traté de acelerar lo más rápido posible, incluso me pasé varios rompemuelles ya que había criaturas, temiendo de que ocurra un accidente. Incluso un compañero chocó contra una moto "Diario El Comercio. Todos los derechos reservados", manifestó uno de los choferes.
Piden 12 soles diarios a los conductores
Los transportistas de esta ruta habían recibido en los días previos al ataque, mensajes amenazantes que les exigía el pago de 12 soles por unidad. Aunque no se precisó el número exacto de vehículos de esta línea, la estimación es de 25 o 30.
Como medida de seguridad para salvaguardas sus vidas y la de sus medios de transporte, varios de estos conductores tomaron la decisión de suspender el servicio de manera indefinida hasta que se les pueda garantizar operar sin riesgos a ser víctimas de los extorsionadores.
La investigación de este caso la tiene la comisaría de Laderas de Villa el Salvador. De momento, las autoridades policiales han recogido testimonios y algunas evidencias en la zona donde ocurrió el hecho. Los delincuentes operarían en los paradores y esperaría a las unidades para agredirlas.
De esta manera, el cobro de cupos por parte de extorsionadores sigue siendo un problema que la Policía Nacional del Perú (PNP) no puede resolver. El último ataque demuestra que esto se da en toda Lima Metropolitana y no tiene cuando acabar.