Lo que comes importa
27/06/2025 / Exitosa Noticias / Salud / Actualizado al 27/06/2025
A medida que pasan los años, a muchos les preocupa olvidar cosas, desorientarse o no poder reconocer a sus seres queridos. Por eso, todo lo que ayude a cuidar el cerebro importa. Estudios recientes han encontrado que un alimento tan común como el huevo podría ayudar a prevenir la demencia.
¿Comer huevo ayuda a prevenir la demencia?
El cardiólogo Aurelio Rojas compartió los resultados de un estudio reciente que viene dando que hablar. Fue publicado en el Journal of Nutrition en 2024 y se hizo con casi mil adultos mayores, con una edad promedio de 82 años.
¿Y saben qué encontraron? Los que comían al menos un huevo a la semana tuvieron 47 % menos riesgo de desarrollar demencia.
Para Rojas, lo mejor es comerse el huevo completo, sin botar nada. "Nuevos estudios independientes sugieren que la colina puede disminuir el riesgo de demencia. Así que, asegúrate de incluir la yema y come al menos un huevo a la semana si quieres evitar la demencia", explicó.
¿Y qué tiene de especial la yema? Pues ahí está la colina, un nutriente buenísimo para el cerebro. Esta sustancia ayuda a que las neuronas estén sanas y se comuniquen mejor entre ellas. Eso es clave para prevenir enfermedades como el Alzheimer.
Para que te hagas una idea, la demencia —según la Organización Mundial de la Salud— afecta la memoria, hace que te cueste pensar con claridad y hasta puede complicarte cosas simples como vestirte o cocinar.
Más razones para comer huevo
Además de ayudar al cerebro, el huevo es bien completo. Tiene todos los aminoácidos que el cuerpo necesita y unos seis gramos de proteína por unidad, lo cual viene perfecto para los adultos mayores, los niños que están creciendo y los que hacen deporte. Encima, esa proteína se digiere fácil, así que el cuerpo la aprovecha rápido.
En cuanto a vitaminas, el huevo es una fuente bastante completa y rica en nutrientes: tiene A, D, E y varias del grupo B, que ayudan a levantar nuestras defensas. También trae selenio, un antioxidante que le da una mano al cuerpo para pelear contra las infecciones y el desgaste natural de los años.
Comer huevo con frecuencia incluso puede ayudar a bajar la inflamación crónica, algo clave en temporadas de frío o cuando andan rondando las enfermedades respiratorias.
Y si hablamos del corazón, los mitos de antes han quedado atrás. Durante años se creyó que el huevo subía el colesterol, pero hoy se ha comprobado que eso no pasa si estás sano.
Más bien, gracias a las grasas buenas que tiene —como los famosos omega-3— puede ayudarte a mantener a raya los triglicéridos, controlar la presión y cuidar el corazón. Eso sí, lo mejor es comerlo sancochado o pasado por agua, sin echarle aceite ni freírlo, para que realmente te haga bien.
¿Y los ojos? También se benefician. La yema del huevo tiene luteína y zeaxantina, dos antioxidantes que cuidan la vista. Ayudan a proteger los ojos de la luz que emiten las pantallas o del sol fuerte, y pueden prevenir problemas como las cataratas o la pérdida de visión con los años.
Con el paso de los años, muchas personas temen olvidar, desorientarse o no reconocer a sus seres queridos. Por eso, cuidar el cerebro se ha vuelto una prioridad. En ese camino, el huevo destaca como una opción sencilla y accesible que podría ayudar a prevenir la demencia.
